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Una vieja amiga de Victoria nos había invitado a una boda en Norfolk. Se habían formado juntas como enfermeras y, si bien en la actualidad solamente se ven, mantuvieron el contacto, aunque sólo sea en Navidad y en los cumpleaños. Mi mujer es la madrina de la hija mayor de Linda y era el día de su boda. Las funcionalidades de madrina de Victoria hace ya tiempo que han caducado y apenas conocía a la novia. No obstante , como es socialmente preciso , nos habían invitado al gran día.

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Era la primera vez que acampaba en la playa de Oregón, y le encantaba de qué forma las montañas verdes y firmes bajaban hasta las grandes dunas de arena y al final se aplanaban en la extensa playa. El sol de agosto había sido lo suficientemente cálido ese día para que pudieran tumbarse y tomar algo de vitamina D sobre sus mantas en la playa prácticamente desierta. Las aves marinas y ciertas parejas que paseaban ocasionalmente por la playa eran su única compañía.

A lo largo de este periodo de exploración, empecé a sondear su culo con mi lengua. Normalmente , empezaba con algo semejante a un masaje de aceite calentado con las manos. Hombros a la espalda, espalda al trasero , las manos apartando las nalgas, la lengua apuntando, rodeando el trasero. recorriendo el curso de su rajita antes de sumergirme hasta donde pudiese meterla. (¿hacen alargamientos de lengua?). Esto fue un juego previo divertido y proporcionó mejores desenlaces , pero todavía no la frecuencia que yo deseaba.

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Todavía le voy a dar una buena cogida, la machacaré bien fuerte como le gusta a mi bebé, hasta llenarla de daddycum. Me pregunto si se quedará embarazada enseguida, o si deberemos volver a hacerlo. ¿O quizás una vez que me haya corrido en tu coñito fértil una vez, ya no te importará, y le dirás a papá que siga llenándola de semen hasta el momento en que tu vientre se hinche, hasta que la pequeña de papá esté llena de un bebé?

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A las mujeres les agrada los hombres jovenes?

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